martes, 3 de septiembre de 2013

Indiferentes



Damos mucha importancia a las propiedades, a las tierras, las casas, y mil cosas más. Sin embargo, parece que la vida humana nos deja indiferentes. Sabemos de mil muertes y aunque nos lleguen a estremecer en el momento, no nos movemos por ello.

Cuántos amigos o conocidos perdemos de vista en el camino, y sin embargo no estamos dispuestos a perder un piso, una joya…

Puede que no seamos capaces de ahondar en las cosas, que nos hayamos hecho demasiado frívolos e insensibles. Pero todo tiene arreglo.

Hada